Es una placa que se forma en tus dientes y contiene millones de bacterias, estas pueden ocasionar enfermedad en las encías, caries, entre otros. El sarro es visible y se hace difícil remover con el cepillo dental. Evitalos cepillándote 3 veces al día con una correcta técnica de cepillado, y no olvides visitar tu odontólogo.